Lecciones de seducción
Constantemente queremos seducir a un “otro” en distintas circunstancias, tanto porque queremos formar pareja, porque queremos revivir un matrimonio de muchos años, o en muchas otras ocurrencias. Para ello la sicóloga Pilar Sordo nos invita a un nuevo proyecto, uno que parte con premisas que exigen más allá de la lectura: la seducción entendida como un proceso activo y apoyada en dos conceptos claves: la autoseducción y el autocuidado.
En este libro se presentan 12 lecciones de seducción que se pueden leer como un todo completo o trabajadas una cada mes; pero que van más allá de los simples consejos útiles y que, al igual que los demás libros de esta autora, nos propone también el país que somos y el que queremos ser, esta vez desde nuestro lado más íntimo.
Los tranvías que yo he visto
"En principio debe decirse, que este trabajo no fue escrito para aquellos que se resisten a creer que el corazón y el sentimiento es obra de los años y mucho menos para los que hacen del olvido del pasado una verdadera proyección del futuro. Creo que esta pequeña labor fue redactada para aquellos que, como el autor, sienten la nostalgia como una distinción, una condición que da prestigio, dándole valor al tiempo pasado, de igual manera que lo hacen los vinos viejos, esos que hay que beberlos despacito, disfrutándolos poco a poco. Tampoco es libro para eruditos o historiadores, ya que prácticamente ha basado su redacción en la evocación (muy fuerte e imperecedera, al parecer) que le ha dejado este vehículo en su sentir más íntimo. Aquí se encontrarán pocas fechas y menos nombres... pero sí muchas imágenes guardadas en la memoria que, como se verá, se encuentra íntimamente gobernada por el corazón del autor. Sin embargo, Los tranvías que yo he visto no solamente pretende dejar plasmados una serie de recuerdos personales, sino que, con una prosa por demás sencilla, intenta pintar para quienes no han tenido la posibilidad de conocer aquellos tranvías platenses, la imagen de su presencia en la ciudad y, tal vez, hacerles añorar el no llegar a haberlos disfrutado."